El equipo del madridismo inició el pasado lunes los entrenamientos. Entre los jugadores se podían observar, caras nuevas e ilusionadas, caras habituales y veneradas por el madridismo puro y caras detestables y maliciosas que aparentemente habrá que aguantar una temporada más.
Rostros cancerígenos que provocan un odio en mí pocas veces
producido hacia un jugador del Real Madrid. Lamentablemente mi rechazo irá a
más, ya que todavía me queda por presenciar la calva campechana del ídolo del
piperío y del Anti-madridismo patrio. Ardo en deseos, irónicamente hablando, de
contemplar el abrazo amistoso entre el adalid del Anti-Mourinhismo y Judas. Una
relación plagada de intereses. Pepe sabe que la única manera de ser titular es
llevarse bien con el que realmente manda en el equipo, y así lo hace. ¿De qué
otra forma podría ser titular esté individuo? El único camino hacia la
titularidad que puede seguir pasa por ser fiel y obediente al que hace las
alineaciones. Futbolísticamente no tiene ninguna opción de arrebatarle la
titularidad a Raphael Varanne, ninguna. En cuanto a Casillas, pues le viene
perfecta la defensa del portugués.
Resulta poco gratificante para el madridismo esté panorama
en el que el traidor Pepe continua, y el noble Karanka tiene que marcharse. El Real
Madrid posee un vestuario sucio, necesitado de una limpieza, limpieza que tristemente
nunca será ejecutada.
Cómo ya comenté en su día, dejar marchar a José Mourinho,
con el paso del tiempo va a ser recordado cómo uno de los mayores errores de la
historia del Real Madrid. El responsable de dicho error: Florentino Pérez. Al
que corea el piperío en cada presentación habiendo ganado con él el conjunto
blanco solamente cinco títulos en diez
años. Es curioso, a Mourinho le pitaban por ganar “sólo” tres títulos en tres
años, a Florentino le aplauden por ganar cinco en diez años.
Definitivamente afirmo con contundencia y remitiéndome a la
pruebas, que el piperío es el sector menos inteligente del madridismo. El
proyecto debió seguir adelante con su pertinente limpieza de vestuario. Esto no
se hizo así, y ahora nos encontramos con una situación que dificulta notablemente
la consecución de títulos y objetivos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario