Álvaro Arbeloa es uno de los jugadores más criticados de la
selección española. Es criticado mayormente por no ser un hacha ofensivamente,
lo reconozco no lo es, pero de ahí a que se le llame “Cono” y demás
barbaridades… me parece excesivo. Ayer se demostró que Álvaro no era tan malo
como parecía. Arbeloa se lesiono y en su lugar entro Juanfran Torres. A partir
de ahí la banda de el colchonero se convirtió en un coladero total. Mientras
que el “Espartano” estuvo en esa banda Ribery apenas causo peligro, pero fue
desaparecer el lateral del Madrid y esa banda se convirtió en Jauja. Me recordó
a la banda de Fabio Coentrao en las semifinales del año pasado en el Allianz
arena, en las que su banda era un completo desastre y llego un momento en el
que Ribery y Robenn ambos juntos atacaron por esa banda.
Infravalorado el trabajo que hace el madrileño. Se demostró
que es el mejor lateral de España con diferencia. Tácticamente tiene un diez,
es un jugador imprescindible en cualquier equipo importante, ya que este tipo
de jugadores son necesarios en equipos que hacen un juego ofensivo en el que
todo el mundo sube al ataque, por ello es necesario, porque en esos casos se
necesita a alguien como Arbeloa haciendo las coberturas en el centro del campo.
Se le critica por hacer demasiados pases atrás, quizás sea
cierto su punto fuerte no es el juego ofensivo, pero señores como ya he dicho
hay veces en las que se necesitan jugadores algo mas defensivos que el resto.
Un pase atrás…lo que debería de haber hecho Juanfran Torres para que el árbitro
hubiese pitado el final del partido.
A si que piensen antes de criticar al mejor lateral de
España. Criticado e infravalorado hasta la saciedad por razones que no logro
entender. Es un jugador como Khedira, criticado por parecer que no hace nada,
que no hace un gran juego ofensivo. Son de esos jugadores que nunca aparecerán
en portada y que hacen un juego poco vistoso, un juego que nadie observa, un
juego oscuro, pero un juego imprescindible y que los entendidos de futbol (No
digo que sea uno de ellos) lo ven y lo aprecian. Como es el caso de Di Stefano,
que siempre ha elogiado a Khedira incluso se ha permitido llamarle “Kherida”.
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